Fue uno de esos sustos de madrugada, esos que te pillan con el pijama puesto y totalmente desorientado.
Pasamos dos días de incentidumbre y otros tres de recuperación. Ha sido uno de esos viruses que suben la fiebre a los cielos (o los infiernos) pero que no se puede tratar... más que con antitermicos.
Es por eso que he estado totalmente desconectada del trabajo, los amigos y del blog, por supuesto.
Hoy se ha quedado mi marido a pasar la noche, mañana nos darán el alta seguramente y yo después de pasar 4 noches casi en vela necesitaba descansar... y estar con Erik que casi ni he visto en estos días.
Estoy deseando volver a la rutina y la tranquilidad de estar todos en casa otra vez.
5 comentarios:
Cuando nuestros hijos se ponen malitos lo pasamos fatal!!! y si están en el hospital sufrimos mucho porque no descansamos ni cuando hacemos turnos y nos vamos a casa. Espero que se recupere pronto tu peque y todo vuelva a la normalidad. Un besote
¡Jolín!. Pues vaya como ha estado la cosa. Espero y deseo de todo corazón que se quede sólo en eso: el tremendo susto. Muchas veces a los críos les sube la fiebre sin ton ni son. Y cuando te acaban diciendo que es un virus, te echas a temblar, por que te da la sensación de que no saben lo que tienen. Al final, es eso: un virus que se va como viene. Pero lo que deja por medio es el susto, la incertidumbre y un mal cuerpo para todos de mucho cuidado.
¡Pobre, que susto habrá pasado!. Que luego sólo sea un vago recuerdo para todos.
Unos besos, y mucho ánimo.
Espero que se recupere pronto. Tengo una ligera idea de todo eso. Los primeros 2 años de mi hijo nos los pasamos en San Juan de Dios, sobretodo de noche.
Un abrazo.
Gracias por vuestros comentarios, espero que esta mañana nos den el alta, por fin ha pasado 24 horas sin fiebre alta (más de 38) y es la condición que nos puso el pediatra.
Gracias otra vez y un besazo!
Hola Mar; supongo que a estas alturas ya todo haya pasado; el pequeñín se haya recuperado, y estéis todos felices en casa.
Besitos.
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